miércoles, 19 de agosto de 2015

Posicion de Trendelenburg.-

La posición de Trendelenburg es, básicamente, la que todas las doñas del barrio sugieren cuando a alguien le da el patatús. En otras palabras, te da el yeyo y ellas te levantan las piernas ("Pa´que la sangre te llegue al celebro") sin piedad de tu falda y enseñando al pueblo entero que hace dos meses que no te depilas las ingles. O sea, que consiste en elevar las piernas y bajar la cabeza, de forma que ésta quede unos 10-15 grados por debajo del tronco. Las doñas tienen razón: sirve para mejorar el retorno venoso en situaciones de bajada de tensión arterial. Pero, ¿para qué se usa en el quirófano? Básicamente, se usa para facilitar la cirugía de la parte inferior del abdomen y de la pelvis. Si a usted le van a operar de una prostatectomía radical por laparoscopia, probablemente, su cirujano pida a lo largo de la cirugía que "le pongan en Tren". Por efecto de la gravedad, las vísceras tienden a ir hacia la cabeza facilitando la manipulación quirúrgica de la zona baja del abdomen.
 
También, la usamos los anestesiólogos y anestesioblastos cuando queremos coger una vía central, porque distiende la yugular interna y disminuye el riesgo de que una burbuja de aire pase a la sangre en el momento del pinchazo.
Pero el "tren", como coloquialmente se la llama, tiene su lado oscuro. La presión del intestino en el diafragma limita la respiración del paciente y favorece el vómito (al aumentar la presión en el estómago). Por otro lado, la compresión de las venas y arterias de la parte superior del cuerpo hace que aumenten, también, la presión en el cerebro y en los ojos y que se produzca hinchazón de la cara y de la vía aérea por la que respiramos (con lo que podemos tener problemas a la hora de retirar el tubo endotraqueal al paciente).
 
Por eso, los anestesistas, en general, limitan el tráfico ferroviario y los "trenes" largos y de alta velocidad.












Contractura de Dupuytren.-

Contractura de Dupuytren
Es un engrosamiento y contractura indoloros de tejidos bajo la piel de la palma y dedos de la mano.

Causas
La causa se desconoce. Un antecedente familiar de la contractura de Dupuytren hace que usted sea más propenso a presentar esta afección. Ésta no parece ser causada por la ocupación o por un traumatismo.
La afección se vuelve más común después de los 40 años de edad y los hombres resultan afectados con mayor frecuencia que las mujeres. Los factores de riesgo son alcoholismo, diabetes y tabaquismo.

Síntomas
Una o ambas manos pueden resultar afectadas. El dedo anular resulta afectado con mayor frecuencia, seguido de los dedos meñique, del corazón y el índice.
Una pequeña protuberancia o nódulo indoloro se desarrolla en el tejido bajo la piel sobre el lado de la palma de la mano. Con el tiempo, éste se engruesa y forma una banda similar a un cordón.
Se vuelve difícil extender o enderezar los dedos. En casos graves, estirarlos es imposible.




Síndrome o Fenómeno de Raynaud.-

Enfermedad de Raynaud
Otros nombres: Fenómeno de Raynaud 


Introducción
La enfermedad de Raynaud es un trastorno poco frecuente de los vasos sanguíneos que afecta generalmente los dedos de las manos y los pies. Esta enfermedad provoca un estrechamiento de los vasos sanguíneos cuando la persona siente frío o estrés. Cuando esto ocurre, la sangre no puede llegar a la superficie de la piel y las áreas afectadas se vuelven blancas y azules. Cuando el flujo sanguíneo regresa, la piel se enrojece y tiene una sensación de palpitación o de hormigueo. En casos severos, la pérdida del flujo sanguíneo puede causar llagas o muerte de los tejidos.
Existen dos tipos de la enfermedad: primaria y secundaria. No se conoce la causa de la enfermedad de Raynaud primaria. El fenómeno de Raynaud secundario es causado por lesiones, otras enfermedades o ciertas medicinas.

Las personas en climas más fríos tienen una tendencia mayor a desarrollar este cuadro. También es más común en mujeres, en quienes tienen familiares con esta enfermedad y en personas mayores de 30 años.

El tratamiento puede incluir medicamentos que mantengan dilatados los vasos sanguíneos. También hay algunas cosas simples que se pueden hacer, tales como:
Mojarse las manos en agua tibia ante el primer signo de una crisis
Mantener sus manos y pies calientes en los climas fríos
Evitar ciertos desencadenantes como ciertos medicamentos y el estrés.



Examen del Sistema Vascular.-

Sistema Vascular



Por la frecuencia con que se presentan alteraciones que dependen de las venas de las extremidades inferiores conviene revisar algunos conceptos de la anatomía. Se distinguen las venas profundas y las venas superficiales. El 90% del retorno venoso se efectúa por las venas profundas. Entre las venas superficiales se distinguen (1) la safena mayor, que se origina en el dorso del pie, pasa por delante del maléolo medial y sigue subiendo hasta unirse con la vena femoral, que forma parte del sistema profundo, a nivel del cayado de la safena, un poco por debajo del ligamento inguinal, en el lado medial del muslo; y (2) la safena menor que se forma por el lado del pie y sube por la parte posterior de la pierna para unirse con el sistema profundo a nivel del hueco poplíteo. Entre la safena larga y la corta existen anastomosis venosas y entre el sistema superficial y el profundo existen comunicaciones a través de venas perforantes o comunicantes.

Tanto las profundas, las superficiales y las comunicantes tienen en su interior unas válvulas unidireccionales que dirigen la sangre (1) en el sentido de retornar hacia el corazón, y (2) desde las venas superficiales hacia las profundas. El retorno de la sangre también se ve favorecido por la acción de los músculos al contraerse, como ocurre al caminar o correr.

Cuando las válvulas fallan por dilatación de las venas o alteración de su estructura, como ocurre cuando ha habido flebitis, la presión hidrostática de la columna de sangre aumenta a nivel de los tobillos cuando la persona está de pie debido a que la columna ya no es interrumpida por las válvulas (que están incompetentes). Este aumento de la presión hidrostática favorece la salida de líquido y la formación de edema. La presión se puede transmitir a la red venosa superficial a través de (1) venas comunicantes o perforantes con válvulas incompetentes, o (2) por una insuficiencia de las venas safenas mayor o menor, donde se comunican con el sistema profundo. Esto favorece el desarrollo de várices y con el tiempo se generan alteraciones tróficas de la piel que se manifiestan por cambios de pigmentación, atrofia, fragilidad, mayor susceptibilidad a infecciones (celulitis), y la formación de úlceras varicosas de difícil cicatrización.

Conviene hacer alguna mención del sistema linfático que es una extensa red vascular que contribuye a drenar líquido, llamado linfa, desde los tejidos del cuerpo para devolverlos a la circulación venosa. Esta red comienza con pequeños capilares linfáticos ciegos que se van anastomosando y forman conductos de mayor calibre hasta que finalmente la linfa drena en el sistema venoso en la base del cuello. A lo largo del camino se van intercalando los ganglios linfáticos que cumplen una importante función inmunológica

Entre el sistema arterial y el venoso se forman extensas redes de capilares en donde se intercambian líquidos, electrolitos y distintas moléculas. Conviene tener presente que (1) la presión hidrostática intravascular tiene una importante participación en la salida de agua desde el intravascular al extravascular, y (2) que la presión oncótica, determinada fundamentalmente por los niveles de albúmina en la sangre, contribuye a la entrada del líquido. También pueden influir cambios en la permeabilidad de los capilares (p.ej., edemas de causa anafiláctica). Si la presión hidrostática está aumentada, o la presión oncótica está disminuida, se favorece la formación de un edema blando. Este se reconoce por el aumento de volumen que genera y porque al aplicar presión con un dedo se produce una depresión en la superficie de la piel que permanece un rato (signo de la fóvea). Si el problema es un menor drenaje linfático, el edema es más duro (p.ej., después de una mastectomía radical con vaciamiento ganglionar de la axila, el brazo puede aumentar de volumen por un infiltrado duro).

Examen Físico:
Sistema arterial.
Cuando existen lesiones estenosantes de tipo ateroesclerótico los pulsos se sienten débiles en los sectores comprometidos o no se palpan.

Cuando existen lesiones críticas arteriales se puede presentar claudicación intermitente que es un dolor por isquemia que se presenta en el sector afectado cuando se efectúa una mayor actividad muscular. Puede ocurrir en las extremidades superiores o en las inferiores. Si es en las piernas, el dolor se presenta al caminar una cantidad determinada de cuadras y se alivia con el reposo.
En una obstrucción arterial aguda el segmento distal pierde sus pulsos, se vuelve pálido y frío, se genera dolor. Según el grado de isquemia se pueden comprometer los movimientos y la sensibilidad (parestesias).

En la insuficiencia arterial crónica se encuentran pulsos débiles o ausentes, frialdad distal y alteraciones tróficas (piel delgada, pérdida de los pelos del dorso de los ortejos y del pie, uñas gruesas). Pueden haber úlceras en las zonas más isquémicas o desarrollarse una gangrena seca de algún ortejo (muerte de tejidos isquémicos que evolucionan a una momificación). También se presenta claudicación intermitente. Cuando el paciente está acostado y se le levantan las piernas (unos 60º), los pies se ponen pálidos, en cambio, cuando las piernas se bajan (sentándose o poniéndose de pie), se observa lentitud en recuperar el color rosado y el llene venoso; después de un rato, puede aparecer un aspecto eritematoso fuerte. Estos cambios pueden no ser confiables si existe aumento de la circulación colateral o insuficiencia venosa con incompetencia valvular.
Otras condiciones que pueden dar lesiones vasculares periféricas son (1) las vasculitis, por compromiso de pequeños vasos (lupus eritematoso diseminado, esclerodermia, etc.); (2) fenómenos embólicos (por endocarditis, rupturas de placas de ateroma, mixomas, trombos auriculares, etc.); (3) tromboangeítis obliterante o enfermedad de Buerger.


Sistema Venoso:
Entre las alteraciones más frecuentes de encontrar están las várices, especialmente procedentes de la safena larga (mayor o interna) y la corta (menor o externa). Las mujeres son más proclives a presentarlas.

En las venas superficiales se pueden presentar inflamaciones, llamas flebitis, por causas traumáticas, infecciosas o químicas. En las extremidades superiores son frecuentes por el uso de cánulas intravenosas. Las flebitis superficiales se caracterizan por presentar eritema en la zona inflamada, dolor, y se palpa un cordón correspondiente a la vena inflamada. En el interior del vaso frecuentemente se produce un coágulo, pero el riesgo de una embolía es bajo, salvo cuando el coágulo tiene posibilidades de progresar al sistema profundo (por ejemplo, cuando está cerca del cayado de la safena larga).

En las venas profundas también se producen flebitis. En estos casos el riesgo de una embolía pulmonar es mayor, y desgraciadamente no siempre los signos clínicos son evidentes. En una tromboflebitis de una extremidad inferior se puede encontrar un aumento de volumen de la pierna, el cual será más extenso mientras más arriba llegue el compromiso trombótico. El paciente puede sentir dolor localizado en la pantorrilla, la cual además se nota como si estuviera infiltrada y, por lo tanto, cuando se trata de producir un bamboleo de las masas musculares, éste está reducido. Si se flecta el pie hacia dorsal y se estira el tendón aquiliano, se presenta dolor en las pantorrillas (signo de Homan). En la superficie de la pierna se ve aumento de la circulación colateral, ya que la sangre se desvía de las venas profundas que están con coágulos, hacia las superficiales.

En cuadros de insuficiencia venosa crónica la pierna se puede ver edematosa y se desarrollan várices. Con el transcurso del tiempo y en la medida que la hipertensión venosa se transmite a la red venosa superficial, se desarrollan cambios tróficos en la piel, especialmente cerca de los tobillos. Entre estos cambios destacan una mayor pigmentación, la piel se nota frágil y puede aparecer una úlcera, especialmente hacia el lado medial. En esta zona se producen con frecuencia dermatitis hipostásicas. El conjunto de estas manifestaciones se conoce como síndrome posflebítico.

Otras úlceras que se pueden presentar en las piernas o los pies son (1) las que se pueden ver en algunos pacientes hipertensos y que se caracterizan porque duelen bastante y se presentan en el tercio distal de las piernas, especialmente en la cara externa o posterior; (2) en pacientes diabéticos con neuropatía y microangiopatía, que tienen menor sensibilidad en los pies, y desarrollan úlceras de difícil cicatrización y que frecuentemente se infectan; (3) úlceras de decúbito en enfermos que no se puede mover por sí solos.

Los pies de los diabéticos requieren cuidados especiales ya que es frecuente que el paciente tenga una neuropatía sensitiva y fenómenos isquémicos que pueden facilidad el desarrollo de úlceras, o la complicación más temida, que es la gangrena húmeda (combinación de isquemia e infección polimicrobiana). Se les recomienda no caminar descalzos, usar zapatos blandos y holgados, secarse bien entre los dedos, inspeccionarse los pies, no usar bolsas de agua caliente

Los trastornos vasculares periféricos (TVP) son condiciones que cambian la forma como fluye la sangre a través de los vasos sanguíneos de su cuerpo. Estos trastornos no afectan los vasos sanguíneos de su corazón y cerebro. Los trastornos pueden presentarse en sus venas o en sus arterias, o en ambas. Estos trastornos también se conocen como enfermedad arterial periférica (EAP). La enfermedad arterial periférica es una condición para toda la vida, que puede empeorar con el tiempo, si no recibe tratamiento. Si tiene un trastorno vascular periférico, usted está en mayor riesgo de presentar problemas cardíacos. La mayoría de las personas con un trastorno vascular periférico siguen igual o se mejoran sin necesidad de cirugía.

Trastornos del sistema vascular periférico:

Oclusión arterial aguda: Aguda quiere decir de poca duración. En el caso de la oclusión arterial aguda, usted presenta dolor súbito y severo, enfriamiento, adormecimiento y palidez en su brazo o pierna. Es posible que los médicos no puedan sentir el pulso (ritmo cardíaco) en su brazo o pierna.



Arterioesclerosis obliterante:  Esta es una condición en que el  engrosamiento y la pérdida de flexibilidad hace que la parte interna de la arteria aumente de tamaño. Esto bloquea el flujo de sangre y oxígeno a través de la arteria.




Enfermedad de Buerger: Esta enfermedad también recibe el nombre de tromboangitis obliterante. Debido a esta enfermedad, las arterias pequeñas y medianas se inflaman. La inflamación se manifiesta con hinchazón, enrojecimiento y dolor. Esta inflamación disminuye el flujo de sangre en los dedos de sus manos y pies, y también en sus pies. Ellos pueden cambiar de color y pasar de pálidos a rojos cuando usted levanta y baja sus piernas y brazos.

Fenómeno y enfermedad de Raynaud: Estas son condiciones en las que se presentan espasmos en las arterias muy pequeñas. Los dedos de sus manos y pies, y algunas veces su nariz y lengua pueden presentar: palidez, color azul o rojo, dolor y falta de sensibilidad. Esto usualmente se presenta cuando usted se expone al frío o tiene emociones fuertes como excitación o preocupación. Esto también puede suceder al sostener un objeto vibrante, como el timón de su carro. Estos problemas pueden durar sólo unos minutos, pero también, pueden durar horas.
                   
Usted puede presentar un trastorno arterial y venoso combinado, como el siguiente:

Fístula arteriovenosa: Puede llamarse fístula AV. Usted puede nacer con esta condición o formarla como consecuencia de una herida de bala o de arma corto-punzante, o como resultado de otro tipo de lesión. Debido a la fístula AV, usted presentará una masa (crecimiento) en su brazo o pierna. Esta masa se siente caliente al tacto y usted puede ver las venas en ella. Su piel puede verse pálida, azul o roja y también hinchada. También puede presentar úlceras (llagas) en su piel.


Usted puede presentar un trastorno o una combinación de trastornos en las venas, como los siguientes:

Insuficiencia venosa crónica: Debido a esta condición, no llega suficiente sangre y oxígeno a su brazo o pierna. Usted puede presentar hinchazón, una sensación de llenura, dolor o cansancio en su pierna. Al pasar el tiempo, su piel puede volverse pálida, azul o roja, y pueden presentarse úlceras.


Tromboflebitis: Esta condición también recibe el nombre de trombosis venosa. Si el flujo de sangre disminuye o si usted tiene problemas con su sangre, las células se aglomeran y forman coágulos. Esto puede pasar después de una cirugía o de una lesión y durante el embarazo. Se forma un coágulo en el vaso sanguíneo y lo bloquea. Cuando esto sucede, usted puede sentir una línea dura, como si fuera un cordón en su pierna o brazo.

 Venas varicosas: Esta es una condición en la cual las venas en sus piernas se tuercen e hinchan. Las válvulas en las venas no funcionan. 

La arterioesclerosis: es una afección en la cual placa se acumula dentro de las arterias. Placa es una sustancia pegajosa compuesta de grasa, colesterol, calcio y otras sustancias que se encuentran en la sangre. Con el tiempo, esta placa se endurece y angosta las arterias. Eso limita el flujo de sangre rica en oxígeno.       

           

Examen Extremidades.-

Extremidades

El examen de las extremidades resulta fácil y rápido de llevar a cabo. Si el paciente se queja precisamente de una extremidad o en ella se descubren anomalías, a veces resulta necesario proceder a exámenes más detallados y específicos.

Posición. Extremidad Superior.
El paciente debe estar sentado, con los hombros descubiertos.

Inspección:
Se compararan los brazos en busca de asimetrías, deformidades, atrofia o hinchazón. Obsérvese el color de la piel, la presencia de manchas de cualquier tipo y vigílese el estado de las uñas. Hay que contar los dedos, para que no pase inadvertida una sindáctila o polidactilia congénita.


Palpación: 
Obsérvense los pulsos radial. cubital. humeral y axilar. Para comprobar la permeabilidad y el flujo de la sangre por estos vasos la prueba de comprensión es una buena alternativa.
Palpar la palma de la mano y observar la temperatura y humedad.



Extremidad inferior:
Posición: Las piernas deben examinarse en ambas posiciones, de pie o acostado.


Inspección:
Observar la piel, su color e investíguese la presencia de úlceras o pigmentaciones.

Palpación: Compárese la temperatura de la piel del pie, parte baja de las piernas y muslo. Busque las pulsaciones de las arterias femoral, poplítea, tibial posterior y pedia. La arteria femoral se palpa entre la espinal iliaca anterosuperior y la sínfisis del pubis. La arteria poplitea se palpa en el espacio popliteo, la arteria tibial posterior se palpa entre el tendón de aquiles y el maleolo interno, la arteria pedia entre el tobillo y la base de los dedos.





Lesiones diversas de las extremidades:
En las extremidades podemos encontrar diversas lesiones como son:
·         Sindactilia: Dos o más dedos están unidos por una membrana.
·         Polidactilia: Presencia de dedos suplementarios en manos o pies.
Callos
·         Melanomas
·         Dedo en martillo: una hiperflexión brusca y violenta de la punta del dedo.
·         Ganglión:  acúmulo de liquido muscinoso unido a una articulación.
·         Tenosinovitos estenosante.
·         Uña encarnada
·         Enfermedad de charcot.

Signos de fracturas
·         Deformidad
·         Acortamiento
·         Equimosis
·         Perdida de la función
·         Crepitación Ósea

 
Hallux valgus:  Es lo que se conoce comúnmente como juanete.


Hallux varus:  Es una deformidad de la articulación del dedo gordo del pie que provoca la desviación medial (interna o hacia el lado tibial) del hallux partiendo del primer metatarso.

Examen Genitales Femeninos.-



Genitales Femeninos




ANATOMÍA DEL APARATO REPRODUCTOR FEMENINO. 


Está formado por los órganos genitales internos, los órganos genitales externos y las mamas.

Órganos internos:
Ovarios 
Órgano par en el que se producen y maduran los óvulos, el gameto femenino. Producen Hormonas 
Trompas de Falopio 
Conductos que comunican los ovarios con el útero y en los que se produce la fecundación. 
Útero
Órgano hueco y musculoso en el que se desarrollará el feto.
Vagina
Canal que comunica con el exterior, conducto por donde entrarán los espermatozoides.


Órganos externos:
Labios mayores 
Pliegues de piel cubiertos de vello.
Labios menores
Repliegues de piel sin vello, con muchas terminaciones nerviosas y glándulas.
Clítoris
Órgano eréctil situado en la confluencia superior de los labios menores, con muchas terminaciones nerviosas. 
Himen 
Membrana delgada y rosada que bloquea parcialmente la entrada a la vagina.

Examen de Genitales Externos Femeninos:



Generalidades:
·  Preferible que la paciente asista con un acompañante.
·         Confianza.
·         Vejiga Vacía.
·         Buena Iluminación.
·         Buena comunicación médico-paciente.








Inspección:
·         Clítoris
·         Orificio Uretral
·         Orificio Vaginal
·         Himen
·         Hematocolpos
·         En patologías a observar:
·         Tumores Evidentes
·         Condilomas
·         Irritaciones
·         Cambios Coloración
·         Zonas Blanquecinas
·         Cicatrices



Palpación:
·         Glándulas de Skene
·         Glándulas de Bartholino
·         Palpación Bimanual
·         Palpación de Anexos
·         Examen de Espéculo

Tacto Vaginal
·         Colóquese de pie, frente o a un costado de la mujer, según le sea más fácil, y efectúe con delicadeza la introducción de los dedos índice y del medio, enguantados y lubricados, para palpar la vagina.
·          Separe los labios mayores con el dedo pulgar y anular de la mano que irá en vagina.
·          Introduzca primero el dedo índice de la mano enguantada y haga una ligera presión sobra la cara lateral de la vagina.
·         Introduzca después el dedo medio de la mano enguantada siguiendo al dedo índice y el contorno natural de la vagina.
·         Apoyando el borde cubital del dedo medio sobre la orquilla vulvar y después sobre la pared vaginal posterior, ejerciendo una ligera presión posterior.
·         Mantenga su pulgar en abducción y los otros dedos flexionados.
·         Palpe la pared vaginal buscando nódulos, masas o dolor. Palpe el cuello y precise su posición, movilidad, consistencia y sensibilidad. Palpar masas es anormal. No mal interprete las rugosidades por masas. El cuello es firme, parecido a la punta de la nariz, y movible cuando la mujer no está embarazada.


Patologías Más Frecuentes:
·         Condilomas Acuminados
·         Carcinoma
·         Linfogranuloma venérico
·         Pólipo Cervical
·         Cervicitis Crónica.
·         Infecciones Causadas por:    
·         Trichomonas Vaginalis
·         Flujo Vaginal Blanquecino
·         Candida Albicans
·         Asociada con Húmedad
·         Chlamydia BacterianaFlujo Vaginal Amarillento 

Himen Imperforado
El himen es una membrana delgada que generalmente cubre parte de la abertura de la vagina. La imperforación del himen es cuando éste cubre toda la abertura de la vagina. La imperforación del himen es el tipo más común de obstrucción de la vagina. La imperforación del himen es algo con lo que una niña nace. Nadie sabe por qué sucede esto. Nada que la madre haya hecho pudo causarlo.


Signos y síntomas de himen imperforado
·         Amenorrea primaria
·       Hematocolpo: El hematocolpos es la colección de sangre menstrual retenida en el interior de la vagina.
·         Hematometra: Es el acumulo de sangre menstrual en el útero
·         Hematosapinx: Es el acumulo de sangre menstrual  en las trompas uterinas
·         Dolos abdominal
·         Retención urinaria

Embarazo:
Amenorrea
Signo de Hegar + (Cervix Ablandado)
Signo de Chadwick + (Tinte Azulado en Introito)

Tumores Ováricos:
Cistadenoma Seroso
Cistadenoma Mucinoso
Endometrioma
Tumores Sólidos 

Torsión Ovárica:
Es una emergencia en ginecología y resulta de una rotación espontánea del anejo sobre su pedículo vascular. Es una urgencia quirúrgica, ya que pone en peligro el ovario y puede incluso poner en peligro la vida de la paciente.

Embarazo Ectópico: 
Es una complicación del embarazo en la que el óvulo fertilizado o blastocito se desarrolla en los tejidos distintos de la pared uterina, ya sea en la trompa de Falopio (lo más frecuente) o en el ovario o en el canal cervical o en la cavidad pélvica o en la abdominal. Cuando el embarazo ocurre en el endometrio del útero se le conoce como embarazo eutópico. El embarazo ectópico se produce por un trastorno en la fisiología de la reproducción humana que lleva a la muerte fetal, y es la principal causa de morbilidad infantil y materna en el primer trimestre del embarazo.

El feto produce las enzimas que le permiten implantarse en diversos tipos de tejidos y, por tanto, un embrión implantado en otras partes del útero puede causar gran daño a los tejidos en sus esfuerzos por alcanzar un suministro suficiente de sangre. Un embarazo ectópico es una emergencia médica y, si no se trata adecuadamente, puede poner en peligro la vida de la mujer.

Cáncer de cuello uterino
Aspectos generales
Los tipos principales de cáncer de cuello uterino son el carcinoma de células escamosas y el adenocarcinoma. El carcinoma de células escamosas comienza en las células delgadas y planas que revisten el cuello uterino. El adenocarcinoma comienza en las células del cuello del útero que elaboran moco y otros líquidos.
Las infecciones prolongadas por ciertos tipos de virus del papiloma humano (VPH) causan casi todos los casos de cáncer de cuello uterino. Las vacunas que protegen contra la infección por estos tipos de VPH pueden reducir en gran medida el riesgo de cáncer de cuello uterino. Una prueba de Papanicolaou para detectar células anormales en el cuello uterino o una prueba para determinar si el VPH está presente permiten encontrar células que se pueden convertir en cáncer de cuello uterino. Estas células se pueden tratar antes de que se forme un cáncer.

El cáncer cervical se puede curar si se detecta y se trata en las primeras etapas.
Habitualmente, el cáncer de cuello uterino se puede curar cuando se encuentra y trata en los estadios tempranos.

Signos y síntomas del cáncer de cuello uterino
Las mujeres con cánceres de cuello uterino en etapa temprana y precánceres usualmente no presentan síntomas. Los síntomas a menudo no comienzan hasta que un precáncer se torna en un cáncer invasivo verdadero y crece hacia el tejido adyacente. Cuando esto ocurre, los síntomas más comunes son:
·         Sangrado vaginal anormal, tal como sangrado después de sostener relaciones sexuales (coito vaginal), sangrado después de la menopausia, sangrado y manchado entre periodos y periodos menstruales que duran más tiempo o con sangrado más profuso de lo usual. El sangrado después de una ducha vaginal o después del examen pélvico es un síntoma común del cáncer de cuello uterino, pero no de precáncer.
·         Una secreción vaginal inusual (la secreción puede contener algo de sangre y se puede presentar entre sus periodos o después de la menopausia).
·         Dolor durante las relaciones sexuales (coito vaginal).

Estas señales y síntomas también pueden ser causados por otras condiciones que no son cáncer de cuello uterino. Por ejemplo, una infección puede causar dolor o sangrado. Aun así, si usted presenta cualquiera de estos problemas, debe consultar inmediatamente a su médico (aunque se haya estado haciendo regularmente las pruebas de Papanicolaou). Si es una infección, necesitará tratamiento. De ser cáncer, ignorar los síntomas puede permitir que el cáncer progrese a una etapa más avanzada y que se reduzcan sus probabilidades de un tratamiento eficaz.